Mensaje y percepción de la vida diaria

¡Carpe Diem!
“Carpe diem quam minimum credula postero” Horacio Odas, 11:8;
aprovecha el día, no confíes en el mañana.

Hoy, domingo, 09 de septiembre de 2007, se ha recibido y comprendido el mensaje de ti Dios.

Domingo comienzo de la semana, primer día del segundo ciclo de tiempo, denominado semana, constituido por 7 días, que están comprendidos entre el domingo y el sábado, las 24 horas de cada día establecen el primer ciclo dado por Dios Padre.

Comenzamos cada ciclo semanal, el día domingo, este día debemos iniciarlo con la fuerte presencia de Dios Padre en nosotros, de manera que se convierte en el día de solicitar su asistencia y su presencia permanente en nosotros.

Que hago, debo hacer un acto de contrición, identificando todos mis faltas y pecados, debo alcanzar la confesión, debo hacer el acto penitencial colocado por el sacerdote, colocando mi mente, cuerpo y alma listos para la comunión.

Así mismo, asisto a la eucaristía, comparto la oración y el encuentro con Dios Padre, recibo a Dios Padre en la comunión, escucho el mensaje de Dios, recibo la misión de la semana, de manera que pueda colocar y mantener mi vida dirigida y alineada con Dios Padre.

Misión:

• Solicitar el don de la Sabiduría a Dios Padre, para fortalecer el espíritu a partir de la comprensión y asimilación de este Don, enriquecer mi vida a partir de la Sabiduría dada por Dios Padre.
• …el que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío. Renunciar y abandonar todo lo que se interpone entre mi vida y Dios Padre. Buscar la libertad a través de Dios Padre, eliminar la esclavitud de mi vida, eliminar la esclavitud mental, emocional y corporal. Cargar con la cruz de Jesús para poder seguirlo.
• Trabajar en la eliminación de los apegos materiales, espirituales y mentales, que encadenan mi mente, cuerpo y espíritu al mundo terrenal e impiden mi crecimiento espiritual.